¿Cómo funciona?

El Plan Argentina Vitivinícola en su primera versión focaliza su acción sobre objetivos estratégicos con efectos relevantes para el desarrollo humano y económico del sector. En especial se orienta hacia aquellos proyectos que necesitan un desarrollo colectivo planificado.

Desde el inicio se definieron tres grandes ejes estratégicos:

1. Posicionamiento de grandes vinos varietales argentinos en los mercados del Norte.
2. Desarrollo del mercado latinoamericano y reimpulso del mercado argentino de vinos.
3. Desarrollo de los pequeños productores de uva para integrarlos al negocio vitivinícola y jugo concentrado de uva.

Para alcanzar estos objetivos establecidos por los proyectos se trazaron grandes estrategias:

• Crear y consolidar una identidad e imagen para el vino argentino.
• Construir un proceso colectivo de integración y articulación que reorganice al sector, le otorgue reglas de juego adecuadas, planifique su desarrollo y facilite su financiamiento para lograr óptima competitividad.
• Construir un proceso colectivo de innovación tecnológico-productiva en todas las fases de la cadena para alcanzar una alta competitividad con sostenibilidad.
• Responder a las aspiraciones y necesidades de los consumidores en cada mercado y segmento.
• Fortalecer la capacidad de negociación para lograr y mantener acuerdos internacionales, proyectos y estrategias.

El PEVI crea una red que incluye a todos los actores públicos y privados comprometidos con el desarrollo de la vitivinicultura y que puedan realizar acciones estratégicas. Este trabajo se realiza a través de las Unidades Ejecutoras que son las entidades u organismos que llevan adelante las acciones y actividades de los distintos proyectos. Pueden presentar propuestas en conjunto con otras entidades que aporten recursos humanos o materiales y que se constituyan en Unidades participantes del mismo.